
24 noviembre 2008
NOVEDADES PARA EL TRAFICO EN LA GC-15 POR LAS OBRAS DE LA ROTONDA BANDAMA
(L)a Provincia publica en su edición digital una información de vital importancia para el tráfico de Medianías y que nos atañe. Habrá que ser muy pacientes y organizar mejor nuestras salidas desde la zona centro de la Isla.
La subida al centro de Gran Canaria se cierra al tráfico durante 45 días a la altura de Bandama
Los coches vía Santa Brígida tendrán que desviarse por el interior de Tafira
El corte, previsto este miércoles o jueves, no afectará al sentido de bajada
Información publicada por La Edición Digital de "La Provincia":
Esta medida que en un principio estaba prevista para la segunda fase de la obra se adelanta por motivos de seguridad, según han dictaminado los técnicos del Cabildo, dado que la vía donde se está acometiendo la obra es de picón y puede existir el peligro de derrumbe.
¿En que nos afecta estas medidas "adelantada
s"?, en nuestro regreso a casa al llegar a la rotonda, pues no podremos transitar por la vía del Monte desde el tramo de la gasolinera Cepsa hasta la parada de taxis del Monte, sino que tendremos que transitar por la paralela de la vía que pasa por la Iglesia del Monte y la trasera del Hotel Escuela de Santa Brígida hablando de forma coloquial.
La bajada hacia a Las Palmas de Gran Canaria y la Zona Sur de la Isla se realizará como hasta ahora con la diferencia que utilizaremos el carril izquierdo reservado hasta ahora para los vehículos que accedían a la Villa, la Vega de San Mateo y Tejeda.
La subida al centro de Gran Canaria se cierra al tráfico durante 45 días a la altura de Bandama
Los coches vía Santa Brígida tendrán que desviarse por el interior de Tafira
El corte, previsto este miércoles o jueves, no afectará al sentido de bajada
Información publicada por La Edición Digital de "La Provincia":
A. R. L. La carretera del acceso al centro (GC-15) se cerrará al tráfico a partir de la próxima semana en dirección subida entre la rotonda de Bandama y el Hotel Escuela y durante 45 días con motivo de las obras de reordenación de la glorieta de Bandama que acomete el Cabildo de Gran Canaria para mejorar la circulación en este punto.A partir de este cierre, previsto entre el miércoles y el jueves, para acceder a Santa Brígida desde la Circunvalación (GC-4) habrá que tomar a partir de la rotonda de Bandama hacia la GC-111 de Tafira Alta -primera salida de la derecha en la rotonda- y subir por la calle Padre Anchieta hasta la calle Real de Coello y de ésta se podrá acceder de nuevo a la GC-15 a la altura del Hotel Escuela.La calle Real de Coello cambiará el sentido que tiene en la actualidad para permitir el acceso a Santa Brígida -ver mapa-. Todos los desvíos estarán debidamente señalizados. Además, los conductores tendrán las alternativas de coger por las vías de La Angostura o Los Olivos para los que se dirigen a Santa Brígida y San Mateo, así como a la carretera de Los Lirios, que se acaba de reasfaltar, para los que van al interior de las urbanizaciones del Monte. Rogelio Frade, director general de la Consejería de Desarrollo Económico, Obras Públicas y Transportes del Cabildo, señaló que estos cortes estaban previstos en la reordenación de la glorieta de Bandama y que son necesarios no sólo para garantizar la seguridad de los usuarios de la vía sino para acelerar el curso de las obras. La Consejería de Desarrollo Económico, Obras Públicas e Infraestructuras y Transportes, que destaca la imposibilidad de ofrecer otra solución que el cambio de recorrido por la calle Real de Coello, pide disculpas a los ciudadanos por las molestias que ocasionarán las obras y les pide el cumplimiento de las señalizaciones.
UNA FRASE PARA RECUPERAR EL ESPACIO DESTINADO AL CENTRO COMERCIAL
21 noviembre 2008
VISITA A LOS LENTISCOS DE PARTE DEL GRUPO DE GOBIERNO
El Ayuntamiento anuncia que realizará actuaciones en materia de aceras, ajardinamiento, repavimentación, limpieza y alumbrado público
El alcalde de Santa Brígida, ha visitado en compañía del concejal de Vías y Obras, Armando Umpiérrez y del concejal de Parques

Lucas Bravo de Laguna, ha destacado que después de la visita y de reunirse con varios vecinos, “está claro que es necesario realizar diversas actuaciones en materia de aceras, ajardinamiento, repavimentación, limpieza y alumbrado público.
El Alcalde añadió que ahora hay que delimitar si algunos de los espacios que necesitan actuaciones son públicos o pertenecen a las distintas comunidades de vecinos. También anunció que se está preparando un ambicioso proyecto de rehabilitación del Parque Central, en el que se prevé una inversión que puede superar los 600.000 euros.
20 noviembre 2008
GUERRILLA EN SANTA BRIGIDA EN EL 1599
LA INVASIÓN HOLANDESA DE GRAN CANARIA EN 1599 Y GUERRILLA EN SANTA BRIGIDA.
"En la mañana del 3 de julio de 1599 unos 4000 soldados holandeses avanzaron hacia la Vega (actual Villa de Santa Brígida)."
La batalla librada en su suelo en 1599 entre las milicias canarias y las tropas invasoras holandesas está reflejada en el lema del escudo de La Villa de Santa Brígida: "por España y por la fe, vencimos al holandés".
Las Palmas a finales del siglo XVI.
La Ciudad Real de Las Palmas era entonces la cabeza del “reino de Canarias”. Se estima que tenía unas 800 casas, correspondientes a unos 3.000 habitantes. Su catedral era la única de Canarias (lo que implicaba que el dinero de los diezmos de todas las islas se administraba desde Las Palmas). También albergaba la Real Audiencia, el tribunal de segunda instancia de
Canarias.La ciudad era, por tanto, muchísimo menor que ahora y ocupaba sólo los actuales barrios de Vegueta y Triana, que estaban separados por el río Guiniguada. El puerto se encontraba “a tres millas”, rodeado de colinas arenosas (de aspecto nada prometedor para la gente de la época). En la catedral de Santa Ana se componían y tocaban piezas de música corales y de órgano y Bartolomé Cairasco de Figueroa, poeta y músico de renombre, organizaba en su casa tertulias dedicadas al dios de las artes, Apolo. La ciudad tenía dos murallas, una al norte y otra al sur y dos fuertes: Santa Ana y Santa Isabel. El puerto lo protegía el castillo de la Luz. Estas fortificaciones estaban dedicadas a proteger a la ciudad de los ataques de piratas y similares, más que de una guerra convencional.

En 1566 estalló la revolución en los Países Bajos en contra de la opresión y centralismo del reinado de Felipe II. Francia, Inglaterra y los Países Bajos firmaron el tratado de Greenwich, por lo que se enfrentaban al rey español. El acontecimiento más conocido de esta guerra es el desastre de la Armada Invencible, vencida por los temporales y la habilidad de los marinos ingleses en 1588. Unos años después, en 1595, una escuadra inglesa con los almirantes Drake y Hawkins al mando atracó en la bahía de la Luz, intentando el desembarco para tomar la ciudad. Los isleños defendieron bravamente a la ciudad y los ingleses tuvieron que retirarse, una hazaña que se recuerda aún hoy, en la fiesta de La Naval.Invasión de los “Ingleses”
El ataque de los ingleses fue probablemente la causa de que a los holandeses, que atacaron la ciudad dirigidos por el vice-almirante Van der Doez en 1599, se les tomara por ingleses. En febrero de ese año se habían cerrado finalmente los puertos a los holandeses, prohibiendo así todo comercio con éstos. La respuesta de Holanda fue la preparar una flota y enviarla a atacar los puertos y dominios españoles en ultramar. A finales de mayo de 1599 partieron setenta y tres navíos, a la que más tarde se unió otro gran barco de guerra. Hicieron escala en Plymouth y pasaron ante las costas de Galicia; después siguieron hacia el sur...
La armada, con unos diez mil hombres, llegó a Gran Canaria el 25 de junio, amaneciendo al día siguiente en la bahía de las Isletas. Los isleños vieron una columna de humo que salía de las colinas de La Isleta y comenzaron a prepararse para la defensa. La estrategia escogida fue la que había logrado vencer a los ingleses: defender el puerto desde las dunas del estrechamiento de La Isleta, en las trincheras de Santa Catalina (por la actual playa de las Alcaravaneras). Los 74 navíos holandeses se habían situado en posición de combate, con unas 150 lanchas de desembarco preparadas para el ataque. Esa mañana hubo un intenso cañoneo entre el castillo de la Luz y los barcos holandeses, varios de los cuales sufrieron grandes daños. El fuego holandés se concentró en el castillo de la Luz, lo que intimidó a su alcaide, quien ordenó cesar el ataque contra el enemigo. Los holandeses pudieron así acercarse más a tierra y batir la costa con sus cañones. A media mañana los holandeses subieron a las lanchas e intentaron tomar tierra en el desembarcadero del puerto, situado a la altura de las actuales calles de Gran Canaria. Pero los isleños, junto con su pequeña artillería y lo cañonazos disparados desde el castillo de la Luz impidieron el desembarco. Los holandeses volvieron al ataque, cañoneando la costa de nuevo. Intentaron desembarcar, esta vez en la cala de Santa Catalina (ahora playa de las Alcaravaneras) que estaba muy bien defendida y de nuevo fracasaron en el intento. Luego lo intentaron en la misma playa, pero
más al norte; después en el desembarcadero. Finalmente los holandeses consiguieron desembarcar por una zona de difícil acceso por mar (entre las actuales calles Luis Morote y Gomera) y que los canarios, por tanto, no habían preparado para su defensa. Los isleños corrieron a combatir la invasión pero no pudieron vencer contra la superioridad numérica de los holandeses. El gobernador quedó, además, malherido y tuvo que ser substituido en los combates siguientes.

Ataque a Las Palmas
Los isleños se retiraron hacia la ciudad, preparando su defensa, llamando a todos los hombres disponibles para su defensa y colocando los cañones que habían podido rescatar del puerto. Los ancianos, las mujeres y los niños abandonaron la ciudad y se refugiaron en la Vega (de Santa Brígida) llevándose todo los objetos de valor que pudieran transportar. Al anochecer (el mismo 26 de junio), los holandeses avanzaron hacia Las Palmas. Los cañonazos disparados desde la fortaleza de Santa Ana les obligaron a retroceder, terminando el combate al caer la noche.Los holandeses continuaron el asedio al día siguiente, domingo 27 de junio. La defensa de Las Palmas se centró en la muralla de Triana, en el torreón de Santa Ana y en el cerro de San Francisco. Los atacantes se atrincheraron, por su parte, en los arenales al norte de la ciudad, trayendo cañones para atacar la muralla de la ciudad.Al día siguiente, lunes, los holandeses tomaron todos los cañones que pudieron (incluyendo los capturados del castillo de la Luz y los colocaron tras algunos edificios por fuera de la muralla, atacando al cerro de San Francisco y la fortaleza de Santa Ana. Hacia la una de la tarde los isleños tuvieron que abandonar la ciudad y marcharse a la Vega de Santa Brígida.
Los isleños se retiraron hacia la ciudad, preparando su defensa, llamando a todos los hombres disponibles para su defensa y colocando los cañones que habían podido rescatar del puerto. Los ancianos, las mujeres y los niños abandonaron la ciudad y se refugiaron en la Vega (de Santa Brígida) llevándose todo los objetos de valor que pudieran transportar. Al anochecer (el mismo 26 de junio), los holandeses avanzaron hacia Las Palmas. Los cañonazos disparados desde la fortaleza de Santa Ana les obligaron a retroceder, terminando el combate al caer la noche.Los holandeses continuaron el asedio al día siguiente, domingo 27 de junio. La defensa de Las Palmas se centró en la muralla de Triana, en el torreón de Santa Ana y en el cerro de San Francisco. Los atacantes se atrincheraron, por su parte, en los arenales al norte de la ciudad, trayendo cañones para atacar la muralla de la ciudad.Al día siguiente, lunes, los holandeses tomaron todos los cañones que pudieron (incluyendo los capturados del castillo de la Luz y los colocaron tras algunos edificios por fuera de la muralla, atacando al cerro de San Francisco y la fortaleza de Santa Ana. Hacia la una de la tarde los isleños tuvieron que abandonar la ciudad y marcharse a la Vega de Santa Brígida.
Guerrilla en el Monte Lentiscal (Santa Brígida).
Los canarios decidieron formar pequeños grupos de milicianos que molestarían a los holandeses con tácticas guerrilleras. El martes por la tarde los holandeses enviaron una primera expedición militar a la Vega, que fracasó sufriendo unas veinte bajas. Van der Doez amenazó entonces con quemar la ciudad y los campos de la isla y pasar a cuchillo a todos los canarios; pidiendo un rescate de 400.000 ducados de oro que los isleños se negaban a pagar. Pero los canarios tenían noticias de que la flota de Nueva España, de camino a América, pasaba cerca por lo que decidieron fingir una negociación del pago del rescate, distrayendo así a los holandeses. Van der Doez lanzó un ultimátum: deberían pagar el rescate antes del 2 de julio.Así, en la mañana del sábado 3 de julio de 1599 u

Esa tarde los holandeses, de vuelta en Las Palmas, saquearon la ciudad. Al día siguiente prendieron fuego a bastantes edificios, hasta que se vieron obligados a regresar a sus naves. Se estima que en total sufrieron unas 800 bajas. Los canarios que retomaban la ciudad se apresuraron a apagar los fuegos pero en muchos casos era demasiado tarde
Los “Ingleses” en la Playa.
La Armada holandesa permaneció cuatro días más en la bahía de la Luz. Finalmente, en las primeras horas del día 8 de julio abandonaron el puerto. Hicieron una escala técnica en Maspalomas (en la llamada, desde entonces, Playa del Inglés), donde enterraron los últimos muertos. La flota partió entonces hacia el Caribe para atacar a las colonias españolas de la zona. Allí murieron Van der Doez y muchos de los combatientes holandeses.Más tarde, pero no sé cuando, la villa de Santa Brígida (dónde vivo) adoptó el lema “Por la Patria y por la Fe Vencimos al Holandés”. ¡Holandeses errantes, tiemblen!
* Van de Doez se pronuncia algo así como “fan der dush”
Bibliografía
"La Batalla Contra la Gran Armada Holandesa de Van der Doez en 1599", por Alfredo Herrera Piqué, Patronato de Turismo de Gran Canaria.
"Las Islas Canarias después de la Conquista" de Felipe Hernández Armesto, Ediciones del Cabildo Insular de Gran Canaria.
"La Batalla Contra la Gran Armada Holandesa de Van der Doez en 1599", por Alfredo Herrera Piqué, Patronato de Turismo de Gran Canaria.
"Las Islas Canarias después de la Conquista" de Felipe Hernández Armesto, Ediciones del Cabildo Insular de Gran Canaria.
" Información de la red".
CUENTACUENTOS EN LOS BARRIOS DE LA VILLA
A través del programa de animación a la lectura Cuentos en el Barrio, cinco Cuentacuentos grancanarios ponen voz a distintos relatos
El ayuntamiento de la Villa de Santa Brígida, ha puesto en marcha un programa de animación a la lectura que, bajo el título de Cuentos en el Barrio, llevará a cinco Cuentacuentos grancanarios por los distintos barrios del municipio.
El concejal de Cultura, Nicolás Benítez, ha declarado que “esta es una iniciativa que desarrolla la Biblioteca Municipal Morales Padrón y que con el apoyo de la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas del Gobierno de Canarias, pretende dinamizar la cultura en todos los rincones de nuestra Villa”. El responsable de

Suscribirse a:
Entradas (Atom)