El ex alcalde de Santa Brígida deja la mesa de contratación y ataca al grupo de gobierno
El ex alcalde Antonio Díaz presentó su dimisión en la mesa de contratación del Ayuntamiento de Santa Brígida por discrepancias con las actuaciones del grupo de gobierno municipal. El edil Antonio Díaz, que abandonó su puesto en la mesa de contratación de la corporación satauteña con fuertes críticas al pacto gobernante -integrado por el que fuera su partido hasta el mandato anterior, el PP, y Los Verdes- ha sido sustituido por el concejal del grupo socialista en el Ayuntamiento de la villa de Santa Brígida Juan Manuel Ramos.La elección de Antonio Díaz ya causó cierta polémica en su día, al inicio del actual mandato, porque fue decidida personalmente por el alcalde de Santa Brígida, Lucas Bravo de Laguna, ante la oposición de Coalición Canaria y PSOE, que consideraban que debió ser consensuado el puesto. No en vano, los socialistas cuentan con más ediles que la formación por la que fue elegido en esta ocasión Antonio Díaz, un colectivo independiente. Lucas Bravo de Laguna, cuando lo designó, dijo que ya el PSOE y CC tenían sus representantes en las dos sociedades municipales: la de la radio y la de deportes.Díaz ha señalado que no veía organización ninguna en el grupo de gobierno que ha salido de las urnas tras las últimas elecciones locales -él era el único miembro de la oposición en la mesa de contratación- y que más bien parecía "una tienda de aceite y vinagre" y "un grupo de mantenimiento doméstico".Antonio Díaz ya tuvo sus diferencia con Lucas Bravo de Laguna a finales del pasado mandato. Ambos eran miembros del PP y Díaz dejó esa formación porque no lo designaron candidato.
CRÍTICAS.
Socialistas y nacionalistas siempre criticaron la elección de Antonio Díaz puesto que no lo consideran un miembro efectivo de la oposición ya que fue el único edil ajeno al grupo de gobierno del PP y Los Verdes que votó la investidura de Bravo de Laguna como alcalde. Asimismo, la oposición ha criticado que uno de los empresarios que pujaron ante un concurso de ordenadores en el ayuntamiento es un amigo personal del concejal de Hacienda, Antonio Ramírez. Sin embargo, no logró ganarlo y el empresario lo ha impugnado.
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